Testimonio de Anne Laure: «Cuidarlo como en el hospital, pero en casa».

A las 31 semanas de embarazo, nuestro bebé nació demasiado pronto y tuvimos que enfrentarnos a muchos miedos e incertidumbres. Después de unos días en la UCI, tuvimos que volver a casa. Ahí es donde Nanny Care se convirtió en un verdadero apoyo. Este pequeño y sencillo dispositivo nos permitió pasar noches más tranquilas, asegurándonos de que nuestro bebé estaba bien.

Testimonio de Anne Laure: «Cuidarlo como en el hospital, pero en casa».

Una idílica y deseada gestación y, a los 28 semanas, la ducha fría.

Me hospitalizan durante 72 horas y luego me ponen en cama por riesgo de parto prematuro. Me dicen que aguante, que hay que tener paciencia y que cada día que pasa es una victoria. A las 31 semanas, rompo aguas en plena noche.

Me dicen que estoy de parto y que es urgente sacar al bebé por cesárea, porque está en posición de nalgas y si se mueve podría ser peligroso. Me entero de que no se manipula a un bebé de 31 semanas como se haría con un bebé a término.

Por lo tanto, corre el riesgo de quedarse atascado en el cuello... Estoy aterrada, devastada, pero sobre todo aterrorizada ante la idea de que le pase algo. Veinte minutos después, ya está aquí: 1,4 kg y 39 cm... demasiado pequeño para venir al mundo, pero ya tan fuerte. Mucho más que sus padres... 3 días en cuidados intensivos neonatales, luego 1 mes en neonatología hasta los famosos 2 kg y 35 días.

Un domingo, os anuncian que la salida está prevista para principios de semana. Y ahí es cuando entra la locura... en casa, ya no habrá enfermeras, ni pediatras, ni monitorización ni saturación de oxígeno... y en medio de todo este estrés, nos tranquilizamos diciéndonos que habrá Nanny Care para hacerse cargo de todo eso. Cuando pasas un mes en neonatología, desarrollas una hipervigilancia y un miedo a las máquinas que suenan.

Pero Nanny Care nos ha permitido tener noches tranquilas. Despertares en los que no oímos respirar al bebé, pero en los que nos decimos «si no respirara, habría sonado» y nos volvemos a dormir tranquilamente. Así que gracias, gracias Nanny Care, por haber tomado el relevo de nuestras valiosas máquinas de neonatología y de las maravillosas enfermeras que trabajan en estos servicios y, sobre todo, por permitirnos estar constantemente tranquilos con solo mirar el destello de luz verde.

Os queremos ❤️

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